Un discurso de ascensor, también conocido como elevator pitch, es una breve presentación que se realiza en el tiempo que se tarda en subir o bajar un piso en un ascensor. Es una oportunidad única para captar la atención de alguien importante y transmitir de manera concisa quién eres y qué haces.
Ejemplos de discursos de ascensor:
Ejemplo 1:
«Hola, soy María, soy diseñadora gráfica especializada en branding. Ayudo a las empresas a desarrollar una imagen de marca única y memorable que les ayude a destacar en un mercado competitivo. Me apasiona el diseño y la creatividad, y me encantaría colaborar contigo en tu próximo proyecto».
Ejemplo 2:
«Hola, mi nombre es Juan, soy abogado especializado en propiedad intelectual. Ayudo a empresas y creativos a proteger sus ideas y creaciones a través de registro de marcas y patentes. Mi objetivo es garantizar que tu trabajo esté seguro y resguardado legalmente. ¿Te gustaría saber más sobre cómo puedo ayudarte a proteger tus activos intangibles?».
Ejemplo 3:
«¡Hola! Soy Ana, fundadora de una startup de tecnología enfocada en soluciones sostenibles para el medio ambiente. Nuestro equipo ha desarrollado una app que conecta a usuarios preocupados por el planeta con opciones eco-friendly en su día a día. Estamos en búsqueda de inversores y colaboradores comprometidos con la sostenibilidad. ¿Te interesaría formar parte de este movimiento por un mundo más verde?».
Como puedes ver, un discurso de ascensor debe ser claro, conciso y persuasivo. Debes captar la atención de tu interlocutor desde el inicio y destacar qué te hace único y relevante en tu campo.
¡Practica tu propio discurso de ascensor y mejóralo cada vez que tengas la oportunidad! Recuerda que la práctica hace al maestro y la clave está en transmitir tu pasión y tu profesionalismo en tan solo unos segundos.