Emprendimiento

Parte inicial de un discurso o escrito

La parte inicial de un discurso o escrito es fundamental para captar la atención de la audiencia y establecer una conexión emocional con ellos. Es el momento en el que se establece el tono y tema principal del discurso, por lo que es importante dedicarle tiempo y esfuerzo para que sea impactante y memorable.

Importancia de la parte inicial

La parte inicial de un discurso es como la primera impresión que se tiene de una persona. Es la oportunidad para destacar, generar interés y mantener la atención de la audiencia durante el resto del discurso. Por ello, es crucial que sea persuasiva, relevante y emotiva.

Ejemplos de discursos sobre la temática

A continuación, se presentan algunos ejemplos de discursos famosos que han destacado por su parte inicial impactante:

  • Discurso de Martin Luther King «I have a dream»: «Tengo un sueño…» es una de las frases más icónicas de la historia de los discursos, que establece el tono y la visión del discurso de forma clara y poderosa.
  • Discurso de Steve Jobs en la Universidad de Stanford: «Estoy honrado de estar hoy con ustedes en su ceremonia de graduación…» es una introducción que conecta con la audiencia y establece la relevancia del discurso para los estudiantes.
  • Discurso de Barack Obama en su toma de posesión como presidente: «Hoy celebramos la majestuosidad de la democracia…» es una introducción que evoca emociones y valores compartidos con la audiencia.

Estos ejemplos demuestran la importancia de una parte inicial impactante y cómo puede influir en el éxito del discurso en su conjunto.

Ideas Finales

En resumen, la parte inicial de un discurso es clave para captar la atención y generar interés en la audiencia. Es el momento para establecer la conexión emocional y comunicar la relevancia del discurso para el público. Por tanto, es importante dedicar tiempo y esfuerzo en su preparación para garantizar un impacto positivo en la audiencia.

¡Anímate a practicar y mejorar tus habilidades en la parte inicial de tus discursos! Recuerda que la práctica y la dedicación son clave para convertirte en un gran orador.